El tiempo perfecto no existe

🕰️ Vivimos esperando.

Esperando a sentirnos listos.

Esperando a que todo encaje.

Esperando el momento perfecto, la señal clara, la seguridad total.

Y mientras tanto, la vida… pasa.

“Y es que esperando el tiempo ideal, estamos perdiendo el tiempo real.”

Nos prometemos que “mañana sí”, que “cuando tenga más claridad”, que “cuando todo se calme”, entonces comenzaremos.

Pero la verdad es que la calma absoluta rara vez llega.

Y cuando llega, muchas veces ya no somos los mismos.

O ya es tarde.

🕊️ La ilusión del momento perfecto

Pensamos que crecer, decidir, lanzarse o amar debe ocurrir en condiciones ideales.

Pero lo ideal es una fantasía.

La vida real es cruda, cambiante, desordenada.

Y en ese caos imperfecto… es donde realmente suceden las cosas que valen la pena.

No es necesario tener todas las respuestas.

A veces basta con dar el primer paso con miedo, con dudas, con el corazón temblando… pero presente.

🌱 El ahora es lo único que tenemos

Hay conversaciones que no tuvimos por esperar “el mejor momento”.

Hay sueños que aún viven en borrador por miedo a fracasar.

Hay relaciones que dejamos ir por no saber cómo volver.

Y todo eso, lo fuimos dejando en manos del tiempo…

como si el tiempo por sí solo pudiera resolver lo que evitamos.

Pero el tiempo no espera.

Y la vida no se pone en pausa para que tú te decidas.

Cada segundo que esperas que todo esté perfecto, es un segundo menos que vives de verdad.

✨ Elegir el presente, aunque no sea perfecto

El tiempo real —este, ahora— es incómodo, a veces confuso, a veces lento…

pero es el único donde algo puede cambiar.

Donde puedes actuar.

Donde puedes comenzar.

No esperes el momento ideal para vivir.

Haz de este momento, el más valiente que tengas.

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